POR MAURO FLORES
- Rafael Belmar y Claudia Hernández, invitados a la ceremonia del volado del encuentro entre Djokovic y Fritz, en el US Open, por su labor en pro del Salón de la Fama del Tenis Mexicano
LO BUENO: Como un hecho extraordinario recibimos la primicia que Rafael Belmar y Claudia Hernández estarían en la ceremonia del volado en el partido que enfrentaría este jueves por la mañana, al ya número uno del mundo, Novak Djokovic, y el estadounidense Taylor Fritz, durante los cuartos de final del US Open, cuarto y último major del año.
Lo anterior es un reconocimiento de la USTA (U.S. Tennis Association) al magnífico y responsable trabajo que hacen en pro del Salón de la Fama del Tenis Mexicano. Claudia y Rafael forman parte del consejo de administración del Salón de la Fama, junto a personalidades como José Carral Escalante, Eduardo Varela Maldonado, Eduardo Martínez Lanz, Elena Osuna de Belmar, Carlos Castañeda Gasca y Héctor Iñaki Ortiz Balausteguigoitia.
El Salón de la Fama del Tenis Mexicano fue oficialmente instituido en el Club de Industriales, el año 2022, y su principal propósito es dar a conocer parte de la historia del tenis nacional. Entonces los tres primeros inducidos y, por cierto, los más grandes representantes de nuestro deporte blanco fueron: Yolanda Ramírez, Rafael Osuna y Raúl Ramírez.
Entonces Rafael Belmar Osuna, presidente del consejo de administración, comentó: “Es un homenaje a Yola Ramírez, Raúl Ramírez y Rafael Osuna, los tres más grandes del tenis mexicano y del tenis internacional y que desafortunadamente parecen olvidades en nuestra historia y que bueno que haya un grupo de personas que esté interesado en salvaguardar la historia y hacerla alcanzable para la juventud que los quiera emular o superar”.
Cada año, el Salón de la Fama incorporará a tres personajes históricos del tenis mexicano y pronto les tendremos más noticias.
LO MALO: Siempre hemos exaltado los valores que el tenis le aporta a las personas y que los padres deben sentirse satisfechos porque sus hijos tenistas quizá no logren emular a sus figuras, pero, sin duda, este deporte los formará como magníficas personas, buenos ciudadanos, grandes mexicanos.
Dicho lo anterior, resulta lamentable que una sociedad que naciera en el 2016 para para construir un extraordinario escenario como el complejo Cancun Tennis Complex termine resquebrajada y cuya única solución se ventilará en los juzgados.
Lo que antes nació como Cancún Tennis Academy y años más tarde se convirtió en Cancún Tennis Complex cerró sus puertas en septiembre del año pasado, después de realizar decenas de torneos antes denominados futures, tanto en la rama varonil como en la femenil y paró por problemas de dinero, pues Alexandro Ortega confirmó que no recibió ninguna aportación económica que la ITF otorga al organizador de cada torneo de 15,000 dólares, y que debió llegar vía FMT.
Después de parar actividades, hubo “negociaciones” entre Alexandro Ortega y Ernesto Álvarez, propietario de uno de los tres terrenos y socio de los otros dos, según nos informaron, para que el propio Ortega le comprara los terrenos o las partes vendieran todo el complejo a un tercero, con las obras en que Ortega invirtió como parte de la infraestructura. Todo estaba por llegar a un arreglo de compra-venta, pero derivó en la ocupación, nada ortodoxa, de la mitad del predio por parte de terceros y que derivó en una querella judicial asentada en carpeta de investigación ante la Fiscalía General de Justicia en Quintana Roo, por delitos como despojo, daño y robo.
Lo anterior, inevitablemente terminará por decidirse en juzgados y por supuesto, solo el tiempo determinará quien tiene la razón. En tanto, los torneos profesionales ITF siguen muriendo en México.
LO TRISTE: el llanto de la griega María Sakkari, tras su derrota ante Rebeka Masarova en el US Open y que la llevó a declarar: “Mi presente es incierto, no sé si parar y descansar o no. Estoy sufriendo en la cancha”; las declaraciones de Laura Siegemund, por el trato que recibió, luego que estuvo cerca de eliminar a Coco Gauff: “Hoy me han tratado como si fuera una mala persona, es la primera vez que lloro en una rueda de prensa”, dijo; o el sentimiento de Caroline García, quien cayó sorpresivamente ante Yafan Wang y no logró enfrentar a la prensa. En sus redes sociales compartió la pérdida de su abuela: “No pude ir a conferencia después de la derrota, las emociones eran demasiadas”. Los sentimientos forman parte del ser humano, los tenistas no son invulnerables.
DE ROMPE Y RASGA: confirman el Campeonato Nacional Varonil de 1ª. Fuerza, del 25 de noviembre al 3 de diciembre en el Club Irlandés de Raqueta, el club líder en nuestro país en los años recientes. Faltan detalles para lanzarlo oficialmente y es casi un hecho que repartirá una bolsa de un millón de pesos. La ilusión y ganas de participar son una constante en los tenistas mexicanos. ¡SEGUIMOS PISANDO FUERTE!