Una vez más la naturaleza no tuvo piedad, ahora fue Turquía el país azotado por un poderoso terremoto de 7.8 grados, hace algunos momentos.
Tras el fuerte movimiento de la tierra, varios edificios colapsaron, dejando a personas atrapadas. Desgraciadamente se prevé que bajo los escombros sean localizadas decenas de personas que no tuvieron tiempo de evacuar.
El país ha entrado en alerta y se ha declarado en emergencia.
Ciudadanos turcos auxilian en las labores de rescate, con la esperanza de poder salvar a hombres, mujeres y niños que quedaron atrapados tras los derrumbes.
Sin embargo, después del terremoto, se han presentado dos fuertes réplicas con magnitudes, una de 6.7 y otra de 5.6, las cuales han recrudecido la situación.
Tras la tragedia, líderes políticos de distintos países, entre ellos México, han enviado sus muestras de apoyo y se han declarado listos para enviar ayuda humanitaria.*